12 noviembre 2015

Visita a la Base Aérea de Zaragoza para intentar mitigar las molestias generadas por el ruido de los aviones

La concejala de Medio Ambiente, Teresa Artigas, junto a la presidenta de la Junta de Casablanca, Elena Martínez, y representantes vecinales de los barrios del sur, se han entrevistado hoy con responsables militares

La concejala de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Zaragoza, Teresa Artigas, junto a la presidenta de la Junta de Distrito de Casablanca, Elena Martínez, se ha entrevistado esta mañana con el general Julián Roldán, máximo responsable de la Base Área de Zaragoza. En el encuentro han participado también Rosa Burgos y Consuelo Andrés, en representación de la Plataforma vecinal de los Barrios del Sur de la ciudad, así como otros cargos militares del equipo del general Roldán.

El objetivo de esta reunión ha sido abordar las molestias que los ruidos que los aviones provocan en sus maniobras de despegue y aterrizaje en la Base Aérea, tanto en su zona civil como militar. Más allá de situaciones concretas que hayan podido producirse durante las recientes maniobras de la OTAN, las quejas vecinales tienen que ver, sobre todo, con las maniobras de aproximación de las aeronaves, durante las cuales se sobrevuelan, a baja altura, al menos, zonas habitadas de Montecanal y Arcosur.

El general Roldán ha explicado que, en los últimos años, han ido afinándose los procedimientos para intentar minimizar los ruidos sobre zonas habitadas. Entre otras medidas, se utiliza de manera prioritaria la pista sur, más alejada de la ciudad, y se han limitado los horarios para los vuelos de práctica habituales entre las 6,45 y las 23,00 horas (salvo excepciones autorizadas). También se ha modificado el ángulo de aproximación de los aviones, de manera que mantengan la mayor altura posible respecto al núcleo urbano.

Por su parte, las representantes vecinales han insistido en su propuesta de la instalación de puntos de medición sonora, que también calculen la ubicación de los aparatos en su aproximación al aeropuerto, para poder delimitar un pasillo de "aterrizaje verde" y poder detectar y conocer con datos contrastados aquellas incidencias que pudieran producirse.

También se ha puesto en evidencia la imprescindible colaboración con los responsables civiles del aeropuerto, ya que muchas de las molestias que se producen vienen provocadas por vuelos nocturnos de grandes aviones de carga.

La concejala de Medio Ambiente, Teresa Artigas, ha solicitado a los responsables militares que sigan extremando estas precauciones para limitar todo lo posible las molestias.  Desde el Ayuntamiento de Zaragoza se van a seguir realizando contactos con los principales responsables del tráfico aéreo para seguir exigiendo su colaboración en este ámbito.

"Aunque es una realidad el hecho de que hay que convivir con la presencia de un aeropuerto en Zaragoza, resulta imprescindible -ha manifestado Teresa Artigas- contar con la máxima colaboración de sus responsables, tanto civiles como militares, para mitigar los ruidos y molestias que generan los aviones".

Artigas ha mostrado su agradecimiento por la buena disposición al diálogo mostrada por el general Roldán y su equipo, y no descarta próximos encuentros para seguir trabajando en esta línea.