Zaragoza reduce un 6% las emisiones de CO2 asociadas a la movilidad urbana gracias al tranvía
El funcionamiento del tranvía de Zaragoza ha contribuido significativamente a la mejora de la movilidad en la ciudad, convirtiéndola en un entorno más sostenible y saludable.
Un estudio del CIRCE establece que ha contribuido a aminorar un 7,68% el tráfico
La puesta en marcha del tranvía de Zaragoza supuso una reducción de un 6 % de las emisiones de CO2 asociadas a la movilidad urbana. Así se desprende de un estudio realizado por el CIRCE, el Centro de Investigación de Recursos y Consumos Energéticos, en colaboración con el Servicio de Medioambiente y Sostenibilidad del Ayuntamiento de Zaragoza en 2015. La investigación analizó el impacto que ha tenido este modo de transporte en la ciudad en términos energéticos y medioambientales.
Según este estudio, realizado por el investigador Abel Ortego, la cantidad de energía final que ahorra el tranvía equivale a 19,6 millones de litros de gasóleo al año y por cada unidad de energía final que consume, ahorra 21. Además la L1 ha contribuido a reducir el tráfico global en la ciudad un 7,68%.
Entre los factores que están destrás de este descenso están el trazado de la línea, que vertebra Zaragoza de norte a sur, y la elevada velocidad comercial gracias al sistema de priorización semafórica. Estas características permiten comunicar barrios periféricos como Valdespartera y Parque Goya con el centro de la ciudad en menos de 20 minutos.
Desde el punto de vista medioambiental, el tranvía contribuyó a reducir las emisiones de los principales contaminantes ambientales: NOx, CO y PM10 en 491,72; 293,21 y 16,82 toneladas al año respectivamente. Este hecho, junto con el impacto del resto de medidas llevadas a cabo en materia de sostenibilidad energética en Zaragoza, origonó que los niveles de emisiones de NOx, CO y PM10 se redujeran un 17,73; 8,83 y 49,11% respectivamente desde 2009 hasta 2015.
Gestión ambiental y accesibilidad
El Tranvía de Zaragoza mantiene la certificación ISO 14001 para la Operación y el Mantenimiento de la Línea 1 desde el año 2014, con el objetivo de minimizar el impacto medioambiental que conlleva su actividad.
La puesta en marcha del tranvía fue acompañada de una importante renovación urbana. Como parte de ella distintos tramos de la plataforma cuentan con una `alfombra verde' natural, cuya extensión total suma 42.000 m2. Además se renovó la vegetación con 24 especies y se plantaron 1.076 árboles a lo largo de su recorrido.
Por otra parte la accesibilidad en el interior de los tranvías, en las 46 paradas de su recorrido y en su entorno renovado es plena: 40 medidas para la accesibilidad del tranvía de Zaragoza.
